El Opel Grandland X es el SUV compacto, y más grande, de la gama Opel. Un producto con unas dimensiones superiores, y más espacio, que Opel Mokka y Opel Crossland X.. Si bien es cierto, las diferencias entre Grandland X y sus hermanos pequeños no son tan acusadas como cabría esperar, teniendo en cuenta que no hay más de 26 centímetros de diferencia entre todos ellos. En cualquier caso, el Opel Grandland X sí que consigue diferenciarse notablemente del resto de SUV de Opel contando con un habitáculo mucho más generoso y espacioso.
Los rivales del Opel Grandland X serán todos aquellos que se sitúen en la categoría del SUV compacto y ligeramente por debajo de los 4,5 metros de longitud. Productos como el Nissan Qashqai o el Seat Ateca, que serán los más parecidos por sus dimensiones, su espacio a bordo, y su precio.
El Opel Grandland X es, además, un SUV que ha sido desarrollado sobre la base del Peugeot 3008. Con lo cual, tras su apariencia de Opel y características estéticas propias de los alemanes, nos encontraremos con un despliegue tecnológico propio de PSA Peugeot Citroën.
Opel ha buscado el lanzamiento de un Opel Grandland X que, no solo quiere diferenciarse de sus hermanos por ser más espacioso y grande, sino también por una imagen más robusta y campera. Cuenta con faros LED adaptativos y la carrocería puede configurarse en dos tonos, uno para el techo, y otro para el resto del coche.
Algunas de las claves del Opel Grandland X
Este modelo estará únicamente disponible con 5 plazas y contará con las últimas tecnologías que se esperan en un coche moderno, desde el control de crucero adaptativo, hasta cámaras de visión 360º y faros delanteros adaptativos. También contará con sistemas de confort como asientos calefactados, tanto delanteros como traseros.
Su espacio de carga será generoso, con 514 litros de capacidad para la carga en el maletero y hasta 1.652 litros abatiendo asientos.
¿Es el Opel Grandland X un Peugeot 3008 con el emblema de Opel?
Es cierto que el Opel Grandland X ha conseguido diferenciarse estéticamente, por dentro y por fuera, del Peugeot 3008. Pero también que a nivel tecnológico estará basado eminentemente en su hermano francés.
En cualquier caso, el proyecto para desarrollar un Opel Grandland X sobre la misma plataforma que el Peugeot 3008 se remonta varios años atrás, mucho antes de que General Motors vendiera a su filial Opel. En cualquier caso, es muy probable que esta sea la línea a seguir a partir de ahora por Opel, con productos que tendrán que aprovechar las tecnologías de PSA y por lo tanto la base de modelos de Peugeot y Citroën.
Los motores del Opel Grandland X
La gama de motores de gasolina del Opel Grandland X cuenta con un único propulsor, el conocido 1.2 Turbo PureTech de 3 cilindros y 130 CV de potencia, asociado a una caja de cambios manual de 6 velocidades.
La gama de motores diésel del Opel Grandland X cuenta con dos posibilidades. Por un lado el igualmente conocido 1.6 BlueHDI de 120 CV de potencia, asociado a una caja de cambios manual de 6 velocidades o en opción a una caja automática EAT6 por convertidor de par. Desde enero 2018, el Grandland X cuenta también con la posibilidad de montar el 2.0 BlueHDI de 180 CV.
También está prevista la existencia de un híbrido enchufable para más adelante, que tal vez podría estar dotado de propulsión eléctrica al eje trasero como los híbridos que hemos conocido hasta ahora en el grupo PSA, si bien este extremo y el resto de características técnicas, así como su fecha de lanzamiento, están por concretar.
No existe un Opel Grandland X con tracción 4×4 mecánica, como ya sucedió con el Peugeot 3008, pero sí posibilidad de incorporar el sistema Grip Control de Peugeot y Citroën y neumáticos M+S para mejorar sus cualidades fuera del asfalto.
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